Zaida Mamani, está siendo investigada por el crimen de su hija Joselin, una niña de 10 años asesinada de más de 40 puñaladas dentro de su casa de Longchamps. Sin embargo, el caso jamás se investigó. La mujer reclama su inocencia y pide que se esclarezca el asesinato.
El 21 de julio de este año en el contexto de una de las tantas citaciones judiciales la periodista Luciana Rosende del medio «Tiempo Argentino», escribió una crónica que relata los pormenores del caso y describe a la mujer en base a los acontecimientos ocurridos.
LA CRÓNICA
Zaida Mamani llegó de Bolivia a los 19 años. A los 23 tuvo una beba. La llamó Joselin Nayla. El padre de la nena las abandonó. La mujer trabajaba haciendo changas de costura para mantener a su hija. Vivían juntas en una casa del Barrio 14 de Febrero en Longchamps, zona sur del Gran Buenos Aires. Hasta el 7 de enero de 2019. Esa mañana, Zaida salió a hacer unas compras. La niña de 10 años quedó sola. Cuando la madre volvió, la encontró agonizando en el piso de la cocina, cubierta de sangre. Le habían dado –se sabría luego- más de 40 puñaladas. La entrada no había sido forzada y no faltaba nada en la vivienda. La causa tuvo pocos avances y no hay detenidos. Pero sí tres imputados. Dos hombres –la ex pareja de Zaida y su hijo-, y una mujer: la mamá de Joselin.
Se enteró el 26 de octubre del año pasado. Recuerda con precisión la fecha y el impacto que le causó el operativo en la puerta de su casa, cuando varios policías llegaron para notificarla. Desde entonces tiene un abogado defensor al que todavía no conoce. Le dijeron que lo podrá ver el lunes próximo, en plena feria judicial. Aún no tuvo acceso a la causa, pero sí fue sometida a varias pericias, psiquiátricas y psicológicas. La última fue este miércoles. A las tres primeras había asistido sin saber que estaba siendo investigada como sospechosa. Creía que se trataba de encuentros con psicólogas para brindarle contención. Pero no. En la causa interviene la fiscal Fabiola Juanatey, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) especializada en Violencia de Género del Departamento Judicial Lomas de Zamora.
FUENTE: Tiempo Argentino
Un testimonio importante que de la compatriota boliviana en el medio del conurbano bonaerense.
“Para la fiscalía fue más fácil llevar la acusación hacia mí y no me parece justo porque durante todos estos años no se ha investigado. Veo una discriminación hacia mí por parte de la fiscalía y eso me duele porque durante estos años he pasado todo tipo de maltrato”, explicó Zaida, en diálogo con DiarioConurbano.com.
En octubre de 2021 le notificaron a la mujer, quien tiene el acompañamiento del Ministerio de Justicia bonaerense, que estaba imputada como sospechosa y posible culpable del asesinato de Joselin y se le realizó una pericia psicológica.
En este contexto, su familia, organizaciones de derechos humanos y feministas se manifestaron para exigir su absolución y que se investigue a los responsables.
“La causa estuvo parada durante mucho tiempo, no se avanzó. La fiscalía no se puso en mi lugar y con falsas declaraciones quedé como imputada por el crimen de mi hija”, afirmó la mujer.
En ese sentido, relató que la fiscal del caso Fabiola Juanatey, de la UFI 2 de Lomas de Zamora, la acusó por declaraciones de vecinos con los que ella “jamás” tuvo contacto.
“La justicia teniendo toda la información que les di no ha investigado. Para la fiscalía fue suficiente las declaraciones de unos vecinos a los que no conozco, pero todo eso se va a tener que aclarar”, sostuvo.
Asimismo, afirmó que por el momento no puede dar mucha información sobre la causa por pedido de su abogado, pero adelantó que “hay pruebas contra una persona que estuvo en el lugar”.
“Mi hija no se merecía morir de esa manera. A mí como mamá me destruyeron y desde hace casi cuatro años espero una respuesta para saber qué pasó con mi hija. Sigo pidiendo justicia porque el asesino no puede estar libre”, expresó la mamá de Joselin.
El crimen
Joselin Mamani fue asesinada con más de 40 puñaladas, en su vivienda del barrio 14 de Febrero, en Longchamps.
El hecho fue descubierto por su madre. Ella había ido al banco y cuando regresó encontró a su hija muerta, en un charco de sangre.
Según informaron fuentes de la investigación, la menor presentaba 32 heridas de arma blanca en su tórax y piernas y 18 en la cara. Así lo indicó la autopsia practicada al cuerpo de la menor en la morgue del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.
La puerta de la reja de la vivienda, ubicada en la calle Silva al 1.500 del barrio 14 de Febrero, Longchamps, se encontraba abierta. No se detectó desorden ni faltaban objetos de valor, pero sí desapareció un juego de llaves que la mujer había dejado en la mesa de la cocina antes de salir. El o los asesinos fueron directamente a matar a la víctima.
En el inicio de la investigación, en la causa estuvieron detenidos la pareja de Zaida y el hijo del hombre.
FUENTE: Diario Conurbano